En el bloque Alineando los Planetas de “La Brújula”, nos visitó Mariela Estrella, astróloga, que nos introdujo en el camino de la astrología y sus significados.
Este espacio permite hablar de Astrología no como una forma de hechizo, o si es de buena suerte o mala suerte, sino entender qué es justamente la lectura de las energías planetarias, que se ha hecho desde siempre del cielo y cómo se mueven los planetas y si esto nos influye a las energías de los seres vivos.
La Astrología propiamente analiza cuál es el posicionamiento y los movimientos de los planetas, por lo que cada individuo al nacer a una hora determinada en un lugar determinado, bajo un signo determinado, bajo un sol que le tocó muestra información de las energías que se predisponen a gestionar en su vida. Al referirnos al signo del zodíaco en el que nacemos, nos denominamos por ejemplo de la siguiente manera: yo soy de tal signo (Piscis), cada uno accionará de manera distinta en la vida de acuerdo al planeta que tenga en ese signo y también relacionado a lo que los astrólogos le denominan casas. En cada una de estas “casas” se encuentra un planeta y por ende una energía disponible para cada aspecto de la vida, esto favoreciendo que sea más liviano, más tenso, menos tenso, o colabore o no.
La luna por ejemplo nos muestra cómo va a mostrarse o expresar sus emociones y cómo siente adentro.
Conocer de qué se trata la astrología colabora para saber el significado por ejemplo de los ascendentes o cuadrantes, entre otros, y de esta manera que pueda comprenderse cada uno.
Los movimientos de los planetas, los cometas y demás movimientos espaciales influyen en las energías de cada signo, por lo tanto afecta a los seres vivos.

Hablemos de lo que se denomina retrogradación. Los planetas giran en la órbita alrededor del sol, que estos retrograden no significa que retrocedan o hagan una elipsis y vuelvan sobre si, sino que nosotros desde la tierra vemos como si volvieran, esto significa retrogradar, si miramos por tomar una muestra a Mercurio, y este realiza el movimiento que lo hace 4 veces al año aproximadamente, genera una interrupción en la comunicación, olvidos, interferencias en líneas de comunicación. Estas energías no son malas, sino que nos piden que vayamos hacía adentro a analizar nuestras propias acciones, porque la astrología respeta el libre albedrío, no nos condiciona, no nos limita, lo que nos muestra son las energías disponibles, y que podemos hacer con eso.
Incursionar en la astrología nos abre un mundo de posibilidades que nos brinda información de posibles acontecimientos o energías que podrían colaborar en hacer de la vida más liviana o llevadera.
Mariela Estrella- Astróloga