“Tortugas de tierra, catitas argentinas y loros amazónicos son principalmente las especies más frecuentes que la gente tiene como mascotas y son de tenencia ilegal, salvo que vengan de criadero que en este caso vienen anillados, con un una guía de que son animales de criadero”, explicó a La Brújula, por Continental San Rafael 92.9, la médica veterinaria Cecilia Sumarán. Y agregó que los pájaros autóctonos de la zona también son de tenencia ilegal y también llegan a su consultorio con bastante frecuencia.
A pesar de ello, comentó que tratan de concientizar que no hay que adquirir este tipo de animales exóticos o silvestres. “Hay gente que quiere uno de estos animales y te lo dice, y otros que los traen directamente al consultorio, por lo general en malas condiciones de nutrición, con enfermedades por la mala alimentación o por el mal cuidado, habitualmente por la falta de conocimiento. Entonces, trato de persuadirlos para que los devuelvan a sus lugares de origen o que los lleven a refugios, cosa que normalmente es muy difícil de lograr”, afirmó. ”Tratamos de concientizar de que no vuelvan a adquirir este tipo de animales, que es ilegal y como cualquier cosa ilegal pueden ser muy bonitos, pueden simpatizarnos pero que no está bueno tenerlo, en especial para el animal. A quienes ya los tienen les explicamos los cuidados que deben tener no solo en cuanto a nutrición sino también al cobijo”, dijo.
Por otra parte, expresó Sumarán que actualmente en el país hay casos de gripe aviar, por eso hay que tener especial cuidado en el control de enfermedades, “todas las aves tienen que estar resguardadas del contacto con otras aves, hablamos de palomas, gorriones y todo eso. Entonces estas especies exóticas traídas de contrabando son posibles riesgos para todos nosotros.”
“La falta de espacio, el acceso al agua o el alimento adecuado provoca estrés en lo animales”, indicó la veterinaria, y comentó que es muy importante interiorizarse en cuanto a los nutrientes que necesitan, si hay que darles un suplemento o darles comidas elaboradas que les aporten lo que les falta. “Nos pasa mucho con las catitas y los loros amazónicos que los alimentan con semillas de girasol y esto es muy dañino para el hígado. Tienen que tener una dieta variada”, concluyó Sumarán.